Tips y consejos
Mal de Páramo, todo lo que necesitas saber
Mal de Páramo, es el nombre coloquial de ese indeseable compañero de viaje que nos acompaña cuando nos aventuramos a visitar las grandes alturas de los estados andinos.
Conocido clínicamente como Mal Agudo de montaña (MAM), en los países andinos se le conoce también como soroche, apunamiento, yeyo, mal de altura o mal de montaña, son reacciones fisiológicas causadas por la poca adaptación de nuestro organismo a la falta de oxígeno, cuando ascendemos muy rápido a altitudes superiores a los 2400 msnm. Y a partir de los 8000 m, comienza la llamada Zona de la Muerte, donde solo los expertos escaladores pueden permanecer algunas horas.
Esto se debe a que, cuanto más ascendemos disminuye la presión atmosférica, lo que provoca que inspiremos menos oxígeno, causándonos hipoxia (falta de oxígeno en la sangre).
Síntomas
Los síntomas son variables según la persona. En algunos individuos los síntomas no llegan a manifestarse, en otros demoran algunos días, pero también se pueden manifestar apenas algunas horas después de ascender o sentir los síntomas brevemente, la única forma de saberlo es viajando a los páramos andinos.
Los síntomas son:
*Dolor de cabeza
*Mareos
*Fatiga
*Agotamiento físico
*Agitación
*Trastorno del sueño
*Trastornos digestivos
*Falta de apetito
*Náuseas o vómitos
*Edema pulmonar#
*Edema cerebral#
# Estos dos últimos indicios son muy graves y pueden provocar la muerte sino se tratan a tiempo.
Por eso es necesario conocer y estar atento a los síntomas y de esa forma poder evitar problemas mayores.
El “Mal de Páramo” se alivia con el suministro de oxígeno, pero siempre el mejor remedio es descender cuanto antes a una cota inferior donde la presión parcial del oxígeno sea mayor.
Consejos y precauciones
Una regla de oro es moverse a paso de tortuga. Sin apuro, sin correr, hacer todo tranquilo, porque sino la altura pasa factura.
Eso no impide que puedas, por ejemplo, hacer trekking, pero siempre a un ritmo muy inferior al que aplicarías estando en lo llano.
También es importante alimentarse bien, aunque con comidas livianas y estar siempre hidratado, este último muy importante porque aunque no sudes el cuerpo consume más agua para mantenerse debido al cambio de presión. Un consejo de los andinos es tomarse una bebida o chocolate caliente, esta última posee gran cantidad de azúcares que en cierto modo ayudan un poco a suplir la gran cantidad de energía que se consume a nivel celular por la falta de presión atmosférica.
Un mito que se escucha bastante es sobre la preparación física y esto va para los practicantes del montañismo. La realidad es que por más preparado que te encuentres físicamente, al superar los 2.400 msnm, deja de hacer diferencia, el mal de páramo afectará a todos por igual sin tener en cuenta su condición física. Hay casos trágicos como el de Yoel Eduardo Yánez Acopio, de 27 años, joven caraqueño practicante del trekking en las montañas de la cordillera de la costa y que contaba con la preparación física necesaria para hacerlo, pero desafortunadamente murió de edema pulmonar producto de la hipoxia al no acondicionar su cuerpo a las alturas de la Sierra Nevada de Mérida.
Zonas a considerar
Ojo, no solo es en los picos del Parque Nacional Sierra Nevada de Mérida es donde puede aparecer el mal de páramo, en la Laguna de Mucubají , el Collado del Cóndor, Timotes y Apartaderos o en poblaciones de baja altura como la Mucuchache o San Rafael de Mucuchíes (3.142msn) también pueden presentarse los síntomas, igualmente en la Sierra La Culata que comparte con Trujillo. Aunque a esas altura menores de 4.000 msnm no debería causar trastornos graves en el organismo.
En los páramos trujillanos, en pueblos como Tuñame, Cambibú o los picos de la Sierra La Culata, La Teta de Niquitao, Pico Guirigay que tienen alturas superiores a los 3.200 metros es donde puede igualmente aparecer este síntoma.
En Táchira el páramo Zumbador a 2600 msnm es agradable y son pocos los turistas que sufren de este mal, ahora sí se dirige al páramo El Batallón debe tomar las medidas pertinentes porque su altura promedio ronda en los 3.500 msnm hasta 3.942 msnm del Pico El Púlpito, el más alto de las montañas tachirenses.
Pero no se angustie si viaja a nuestros hermosos páramos venezolanos, siguiendo estos consejos le aseguramos que disfrutará del viaje, sino se llevará un recuerdo como dicen los pobladores de Tabay en Mérida: “eso no es mal de páramo, es el inmenso amor que recibiste de la montañas merideñas”.
GM/TDG